Nuestra máxima casa de estudios, la UNAM, se caracteriza por la gran difusión que da a la cultura en sus planteles, el soporte que da a las tradiciones para que estas se sigan preservando en nuestra conciencia histórica nacional; una de estas tradiciones es la del “día de muertos”.
Estos días por disposición oficial no se trabaja y como dicta la costumbre, se prepara una ofrenda para aquellos seres queridos que ya no están más con nosotros, pero en el CCH, al ser una escuela que prepara personas con una conciencia social la temática cambia un poco.
Todos los años se lleva a cabo el “concurso de ofrendas” en los diversos planteles de la UNAM siendo el principal el que se presenta en C.U; los temas que por lo general se abordan son política, economía, etc. todo aquello que aqueja a nuestra sociedad en la actualidad aunque también estan aquellos que representan situaciones históricas o nuestras raíces.
Se forman equipos de bien un grupo de amigos o de compañeros de salón, juntan ideas, descartan otras, el punto aquí es que quien gana es por ser el más creativo al momento de plasmar sus ideas en una ofrenda.
Una buena preparación lleva tiempo, pero al finalizar todo la escuela se reviste de colores y aromas embriagantes que encantan a cualquiera, así es durante todo el día, más eso no es todo ya que a parte de este concurso se hace otro un poco más artístico, o bien, cómico dependiendo de cada persona; nos referimos al concurso de disfraces. En este caso los concursantes simplemente tienen que llevar algún disfraz sin importar que tan simple o complejo sea, aquí se esta expuesto a los abucheos o aplausos del público quien decidirá al ganador. Terminando esta etapa del día, las ofrendas continúan, estas tienen jueces quienes pasaran a cada una de ellas para recibir una explicación a cerca de la idea expuesta. Al final de la tarde, después de un arduo trabajo para unos, se nombra al ganador del concurso.
Este año, al parecer hubo menos ofrendas de lo esperado, algunas decepciones también, errores que nunca faltan, algunas ideas que a pesar de ser reutilizadas no dejan de sorprender y una, que por parte de los jóvenes de primer ingreso fue de las que destacaron entre los montones de ofrendas. La ofrenda era dedicada a Quetzalcóatl, una deidad que representativa de las culturas Mesoamericanas; estaba hecha con pet, una idea que tiene como fin crear conciencia y hacernos ver que no es difícil ni necesario gastar los millones para hacer una buena presentación, con el simple hecho de reciclar siempre y cuando se tenga ingenio.